Como ya tuve oportunidad de compartir todas y todos, uno de los más abominables crímenes que se pueden cometer en contra de los seres humanos someterlos a condiciones de esclavitud y de explotación sexual. Ahora mismo, mientras estáis leyendo esto, miles de personas en todo el mundo, mujeres y niñas principalmente, pero también hombres y niños, están siendo comercializados como meros objetos de placer sexual. A través de la trata las víctimas son cosificadas y tratadas como mera mercancía de puro consumo, de usar y tirar, arrebatándoles todos sus derechos y su dignidad como seres humanos. Por eso, por ser uno de los crímenes más aberrantes que se pueden cometer contra seres humanos, es por lo que la trata con fines de explotación sexual, está reconocido como un CRIMEN DE LESA HUMANIDAD en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.
No nos engañemos, está pasando ahora mismo y cerca de donde tú vives. En tu misma ciudad o a muy pocos kms de ella, a la luz de todo el mundo, mafias organizadas, empresarios de la noche, proxenetas y cargos públicos contribuyen, con el conocimiento y pasividad de las Administraciones Públicas, a que haya seres humanos que están siendo salvajemente explotados y cosificados como objetos sexuales a través de un SISTEMA DE PROSTITUCIÓN FORZADA.
Los datos que están sobre la mesa reflejan que, desde 2003, cerca de 2.800.000 de seres humanos han sido detectados como víctimas de un actividad delictiva que supone un enorme negocio para las mafias dedicas a las explotación laboral y sexual. Algunos estudios han determinado que, solo en la Unión Europea, hay entre 50.000 y 80.000 víctimas de la trata con fines de explotación principalmente sexual. Sin embargo, se tiene por cierto que por cada víctima de la trata que es identificada existen, al menos, otras 20 víctimas más que todavía no han podido serlo. Es decir, multipliquemos 2.800.000 x 20. En total, 56.000.000 DE PERSONAS QUE ESTARÍAN SIENDO AHORA MISMO VÍCTIMAS DE LA TRATA EN EL MUNDO.
Por tanto, si tomamos en consideración este dato, nos encontramos ante una situación alarmante donde cuesta imaginar la dimensión real que supone la trata de seres humanos a nivel mundial. De hecho, se estima que el volumen de beneficios sobrepasa los 40.000 millones de euros en todo el mundo situándose al mismo nivel de beneficio que el tráfico de armas, que el tráfico de drogas y en donde las el porcentaje de víctimas arroja que, en general, según el Informe de la UNODC el 72% de las víctimas son mujeres y niñas (49% mujeres y 23% niñas) frente al 28% de hombres y niños (21% hombres y 7% niños). Y si estamos ante un sistema de explotación sexual forzada, un 94% son mujeres y niñas (68% mujeres y 26% niñas) frente al 6% de hombres y niños (3% hombres y 3% niños).
Víctimas de la Tratas de Seres Humanos Víctimas de la Trata por sexo.
No nos engañemos, la realidad es esa y los proxenetas están llevando a cabo su actividades de forma cada vez menos visible pero igualmente repulsivas. Incluso, tal y como determina el Informe de la Comisión Europea de 2016, lo están haciendo de manera en la que fuerzan la interpretación de las normas legales para trabajadores autónomos. Es más, de acuerdo con el Informe de la EUROPOL de febrero de 2016, en aquellos países en donde existe una cobertura legal para el ejercicio de la prostitución es mucho más frecuente la búsqueda de «mano de obra barata» en donde los traficantes y proxenetas utilizan el marco legal para continuar con la explotación de sus víctimas con total impunidad legal. Por tanto, a pesar de los distintos esfuerzos a modo de medidas puestas en marcha, la trata de seres humanos con fines de explotación sexual no solo no está siendo debidamente aborbada sino que, como muestra de la ineficacia de las medidas que se anuncian, sigue en aumento. Ejemplo de ello es el caso de España que está en segundo lugar (por detrás de Italia) en cuanto al número de casos de redes de prostitución desarticuladas y en donde el beneficio de la trata de personas con fines de explotación sexual supera los 5 millones de euros al día. En total, los beneficios que obtiene la trata ascienden cerca de 2.000 MILLONES DE EUROS A AÑO SOLO EN ESPAÑA.
Las redes dedicadas a la explotación sexual no tienen límites a la hora de captar a sus víctimas entre los más vulnerables. La reciente crisis migratoria que vivimos desde hace ya varios años ha sido un verdadero caldo de cultivo para que las redes de captación puedan cebarse sobre todo con las mujeres, niñas y niños migrantes y refugiados. Así lo ha puesto de puesto de manifiesto la propia Comisión Europea en su Comunicación sobre el estado de ejecución de las medidas prioritarias en el marco de la Agenda Europea de Migración. En ella, se hace eco de los fallos del sistema de asilo que son aprovechados por las redes de captación para intenta captar a mujeres subsaharianas que parten desde Libia como principal punto de salida al Mediterráneo y dado que el país, debido a los enfrentamientos y a la inestabilidad, es fácil para las redes utilizarlo como punto estratégico de salida hacia Europa y para el mercado negro de esclavos. Algo que también ha sido denunciado desde la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Por todo esto, es de vital importancia el trabajar en los países y zonas de vías de desarrollo, y también en aquellas otras en donde existen conflictos armados, para evitar que los sectores más desfavorecidos de la población caigan en manos de los señores de la guerra, de las redes del narcotráfico y, en este caso, en las redes de trata de personas con fines de explotación sexual. Pensemos que estas redes se aprovechan de la situación de VULNERABILIDAD de aquella parte de la población que huyen del hambre y de la guerra.
Por tanto, no existe esa supuesta «voluntariedad» a la hora de entrar en la red de explotación sexual. Esa es una falacia que hay que combatir con toda la fuerza de los argumentos y con la verdad de una realidad que afecta a millones de seres humanos en todo el mundo que, ante una dramática situación familiar, caen en las redes de la trata. Es decir, la víctima podrá en un momento determinado «consentir» en entrar en la red para huir del hambre, de la guerra o para ayudar a su familia pero si las circunstancias no les son adversas, salvo casos muy contados, NUNCA ACCEDERÍAN VOLUNTARIAMENTE. Ya dije en su momento que es preciso que desvinculemos estas dos palabras (consentimiento y voluntad) porque una persona, ante una situación extremadamente adversa, puede «consentir» en entrar en la red pero si esas circunstancias no existieran en infinita mayoría de los casos JAMÁS LO HARÍA DE FORMA VOLUNTARIA. Y, sin embargo, a pesar de todo esto, las víctimas son criminalizadas mientras que los cabezas de las redes de explotación sexual continúan captando a más víctimas bajo una práctica y casi total impunidad.
Estamos fallando tremendamente en el enfoque que tenemos que dar a la lucha contra la trata. Es innegable que nos queda mucho por hacer y hemos de hacerlo a la mayor brevedad posible porque el problema no está disminuyendo, todo lo contrario, continúa en ascenso mientras que las autoridades siguen mostrando una CLARA FALTA DE VOLUNTAD POLÍTICA para implementar medidas que verdaderamente contribuyan a la erradicación de la trata de seres humanos con fines de explotación sexual.

Hoy, DÍA INTERNACIONAL CONTRA LA EXPLOTACIÓN SEXUAL Y LA TRATA DE PERSONAS, quiero que penséis nuevamente en esto: Mientras lees este texto, hay gente que está siendo vendida como mercancía y que, muy probablemente, está llegando a tu ciudad ahora mismo. Da igual de dónde sea la mujer, la chica, la niña, el hombre, el chico y el niño. Ahora mismo esa víctima puede estar llegando a tu ciudad, MUERTA DE MIEDO, y sin saber qué va a ser de ella, sin saber qué está pasando, sin saber si dónde se ha metido realmente, sin saber si volverá a ver a su familia, sin saber si volverá algún día a ser libre y, sobre todo, con el paso del tiempo, sin saber qué va a ser de ella cuando ya a nadie le interese.
Mientras aquí nos quejamos de que tenemos que volver a votar en unas cuantas semanas, hay gente que es invisible, que no vota, que no tiene voz, que no existe para nadie, que son únicamente objetos de consumo. No olvidemos de que, a pesar de nuestras carencias, si tenemos vocación de llegar a ser una sociedad plural, justa, feminista, democrática y avanzada, es tiempo de que, de una vez por todas, EXIJAMOS a nuestros gobernantes medidas claras y efectivas para luchar contra la trata de seres humanos.
RECORDEMOS: La trata, es un atentado a la inviolabilidad de la dignidad humana; la trata, es arrebatar el don de la libertad a un ser humano indefenso y desprotegido; la trata, es una violación de los derechos humanos; la trata, es un DELITO CONTRA LA HUMANIDAD.
